El gobernador de los quindianos, Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá, quedó gratamente sorprendido durante las reuniones que sostuvo con la comunidad de las veredas Barcelona Alta y Baja, el barrio Alto de la Taza y sectores aledaños, pues el trabajo comunitario que él promueve es común en estas zonas, donde los líderes han logrado que se realicen varias obras y acciones por el bien común de sus vecinos.
En la vereda Barcelona Alta se destacó la realización de varios emprendimientos, la conservación de la cultura ancestral, las actividades culturales y deportivas para ocupar el tiempo libre de los jóvenes y así evitar se sean víctimas de redes delincuenciales o del consumo de estupefacientes y el mantenimiento de las huertas orgánicas, para lo que cuentan con asesoría técnica del departamento.
Los habitantes de este sector conocieron el proyecto para poner en funcionamiento el ‘Paso de Los Aguadeños’, que desde hace décadas estaba sin funcionamiento, para lo que ya se instaló el puente gestionado ante Invías, y cuando termine la temporada de lluvias se continuará con el arreglo de las vías que lo complementan. Entre las necesidades que expuso la comunidad se encuentran el mantenimiento de la carretera a Montenegro y tapar los huecos en las vías que aparecieron por el deterioro del asfalto, para lo que ya se cuenta con un plan para dar solución.
En esta zona rural, el gobernador conformó una comisión ciudadana para analizar las actividades productivas de la vereda que tienen conflicto de intereses, para resolver cualquier dificultad y promover la sana convivencia.
En su encuentro con los barrios Simón Bolívar, Porvenir, La Plancha, San Vicente, Obrero, Alto de la Taza, Humberto Martínez, Rincón Santo, San José y Centro, el mandatario de los quindianos también conoció el trabajo de la JAC de Alto de la Taza, reconocida como la más organizada de todo el departamento, y que gracias a ello, los vecinos han logrado un convenio solidario con la alcaldía para pavimentación de vías y otras acciones para el beneficio común.
El presidente de la JAC de Alto de la Taza, Jorge Guillermo Vargas Torres, así lo explicó: “Al organizarnos, los entes gubernamentales nos apoyan en las solicitudes para obtener los recursos. Hemos logrado integrar a la comunidad con patrocinadores, en la caseta hacemos tardes de esparcimiento, conseguimos reflectores que nos hacían falta para mejorar la seguridad, fomentamos el deporte, celebramos fechas especiales. Aquí entendimos que trabajo no es solo responsabilidad del Estado, sino que la junta lidera, los ciudadanos ponen de sus recursos y el Estado apoya, porque los recursos son reducidos”.
En esta comunidad, los ciudadanos presentaron inquietudes como el mejoramiento de la cancha de fútbol, la instalación de gas domiciliario, humedad en las viviendas a causa de un tanque que tiene una filtración de agua, la instalación de un parque infantil y de una luminaria, situaciones cuya revisión quedó a cargo de la administración municipal.