Tras el anuncio del presidente Iván Duque de que el Gobierno Nacional levanta a partir del próximo 30 de junio la Emergencia Sanitaria decretada en el país para enfrentar la pandemia por COVID-19, el departamento del Quindío continúa con el proceso de vigilancia epidemiológica intensificada.
El levantamiento de la medida tomada el 12 de marzo de 2020 obedece a aspectos evaluados por las autoridades sanitarias y el Comité Epidemiológico de la nación, que analizaron la baja progresión del COVID-19 y sus escenarios a futuro propuestos por el Instituto Nacional de Salud, INS. En el Quindío, el comportamiento del virus ha presentado cambios significativos, gracias al proceso de vacunación y una reducción importante en el número de fallecidos, de casos positivos y casos graves que requieren hospitalización.
Ante este lineamiento presidencial, la epidemióloga de la Secretaría de Salud del Quindío, Ana Cecilia López Vidal, explicó: “No existen ya razones epidemiológicas analizadas científicamente por el Comité para mantener la Emergencia Sanitaria más allá de la fecha que determinó el Gobierno Nacional; con ello sigue el proceso de vigilancia intensificada; vigilancia de infecciones respiratorias agudas, que como agente causal es el COVID-19. No quiere decir que el COVID haya terminado, sino que cambian los procesos de vigilancia epidemiológica y de seguimiento, siempre de la mano de buenas coberturas de vacunación, de que la población acceda al biológico, medida que ha demostrado ser la más efectiva para la protección de la vida. En adelante seguiremos con un monitoreo para garantizar que vamos a captar de manera oportuna situaciones de emergencia”.
Al término del Decreto de Emergencia Sanitaria, la Secretaría de Salud del departamento continuará con la búsqueda activa de población susceptible para vacunación. Además el ente seccional enfatiza en el llamado a la sociedad para seguir con las medidas de autocuidado; adicionalmente, recomienda a las personas que presenten sintomatología relacionada al cuadro gripal que procuren el uso de tapabocas de forma permanente y evitar asistir a lugares que puedan ser foco de contagio para el resto de la población, entendiendo que la vacunación va orientada a disminuir los casos graves, lo que influye en el comportamiento epidemiológico, pero no evita que se sigan presentando casos, ya que el virus sigue circulando en el territorio y en el país.