A portas de completar el grupo de familias que compondrán la población con la que trabajará el centro de innovación y productividad agraria operado por Cintagro en Calarcá, el proyecto financiado con recursos de regalías, se acerca a la fecha en la que se encienda la maquinaria y arranque la etapa en la que se transformará el café cultivado por estos beneficiarios, con el fin de ejecutar el componente de transferencia tecnológica que sumará al proceso de agregar valor a su producto.
El secretario departamental de Agricultura, Julio César Cortés Pulido, calculó que la selección de los productores con los que se trabajará registra un avance superior al 90%, al contabilizar 750 familias de las 800 en las que se llevará a cabo la intervención. “La gran mayoría de los productores involucrados en la iniciativa ya tuvieron los respectivos vuelos con dron para medir las dimensiones de su predio; un proceso de identificación que representa el inicio de la planificación del negocio. Asimismo se ha efectuado una serie de capacitaciones para que identifiquen los defectos físicos del café, que hacen que el grano pierda valor en mercados”, ilustró.
El fortalecimiento del centro de innovación y productividad agraria tiene un valor por encima de los 5 mil 338 millones de pesos –un valor que deberá ser modificado debido a que el costo de los elementos ha subido con relación a la fecha inicial de formulación-, y contempla acciones como la identificación del perfil de taza y las variables organolépticas determinan su calidad; la formación en procesos de transformación como la trilla, la granulometría o la clasificación en malla; y la participación en una plataforma virtual de comercialización que busca conectar sin intermediarios a agricultores con sus aliados comerciales.
Julio César Cortés, secretario de Agricultura, sobre los avances en el proyecto de Cintagro