Frente al fallo emitido por el Tribunal Superior del Distritito Judicial de Armenia, que declara el Valle de Cocora como sujeto de derechos, la activista y abogada Johanna Suárez Montejo, explicó que aunque presenta ciertos vacíos que requieren delimitación en cuanto a cuáles son las verdaderas competencias de todos los actores, debe entenderse como un llamado al trabajo conjunto, en el que es necesario establecer los límites y los parámetros claros para generar una defensa real y verdadera del territorio.
“Sin duda alguna, Cocora tiene su magia, su encanto y una total gratitud para el mundo. Este fallo es el reconocimiento a un trabajo que se ha realizado en el departamento por defender el corazón de Colombia. Se debe convocar a una mesa de trabajo en la que estén todos los actores involucrados, un lineamiento de defensa conjunta donde se establezca cuál es la capacidad real de carga, los polígonos de protección y las acciones que nos van a llevar a la defensa del territorio”, puntualizó.