Con plena disposición para aportar a la cartera del hospital La Misericordia, pero sin los documentos que sustenten el pago; así se mantiene la administración departamental frente a la crisis del centro médico asistencial con sede en Calarcá, luego de haberse surtido una reunión ordinaria de la junta directiva este lunes en el Centro Administrativo Departamental – CAD.
La secretaria departamental de Hacienda, Aleyda Marín Betancourt, explicó que aunque la Gobernación tiene claro que le adeuda a La Misericordia una suma de 300 millones de pesos, solo han sido conciliados y auditados 52 millones –que ya están en proceso de pago por parte del gobierno departamental. “La norma obliga que, cuando hay servicios que el hospital presta y no los cobra, se debe cumplir con unos requisitos de conciliación y auditoria, para que cuando la cuenta esté debidamente legalizada, Hacienda la pueda cancelar. Llevo 6 meses reiterándole al hospital como secretaria de Hacienda, el debido trámite conseguir los recursos y girarlos”, precisó.
Sin embargo este llamado no ha prosperado y la información sigue retenida por la gerencia de La Misericordia. De hecho el primer punto que iba a ser tratado por la junta, correspondiente con el plan de contingencia, no fue tratado por problemas técnicos con los archivos aducidos por los representantes del centro médico. Para agravar la situación, se hizo manifiesta la inconformidad de la Gobernación por la débil recuperación de la cartera ejercida por la gerencia.
“A diciembre 31 de 2020, el déficit estaba en cerca de 5.500 millones de pesos; algo aceptable si se cuenta con una buena gestión administrativa que adelante cobros coactivos agresivos a las EPS, pero todavía estamos esperando una respuesta aceptable en la materia. Hoy en día el déficit se ha incrementado a 12 mil millones y la cartera morosa tiene un deterioro de 4 mil millones, con lo que la cobrable suma más o menos 7 mil millones de pesos”, reiteró.