Con el ánimo de rescatar los aspectos positivos y evaluar la primera experiencia ejecutada en la cordillera durante el primer semestre del año, se llevó a cabo la primera reunión del Plan Cosecha para la temporada que tendrá como protagonista a los municipios del plan del departamento. En el encuentro participaron entidades como el Ejército, Policía, Cooperativa de Caficultores y Comité de Cafeteros, mientras que la administración de Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas estuvo representada por las secretarias de Agricultura, Interior, Salud e IDTQ.

El director ejecutivo del Comité, José Manuel Vásquez Arenas, estimó que el alcance de esta cosecha calcula que a los municipios del plan ingresarían cerca de 120 mil millones de pesos por concepto de 980 mil arrobas recolectadas, por lo que se requerirá una fuerza de trabajo de 10.500 recolectores.

La magnitud de la operación obligará a que se implementen estrictos controles de bioseguridad en campos como el transporte intermunicipal y veredal, así como la aplicación del protocolo creado por la Federación de Cafeteros y avalado por el ministerio de Salud por parte de propietarios, administradores y patrones de corte de los predios. "Entre las medidas, se concertó que los trabajadores llegarán a las fincas con un examen previo para evitar condiciones sospechosas", aseguró el secretario de Agricultura, Julio César Cortés Pulido, "un esfuerzo razonable si se tiene en cuenta la oportunidad de generación de empleo que representa, con ingresos por recolector de entre 500 y 600 mil pesos libres de dormida y comida".

La próxima semana los actores institucionales vinculados se reunirán de nuevo para elaborar los detalles del plan departamental, y posteriormente el gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas convocará a los alcaldes con el fin de precisar particularidades para cada municipio. Entre tanto, los dueños de las fincas pueden comunicarse con sus extensionistas o a la Secretaría de Agricultura para definir cuánto personal requieren y pronto se realizará la convocatoria para la inscripción de los recolectores.