Gran interés por parte de las tres gobernaciones que hacen parte de la Región Autónoma de Planificación (RAP) del Eje Cafetero, obtuvo la propuesta de unir esfuerzos y aprovechar las casas delegadas de Quindío y Risaralda en Bogotá, para acoger diversas iniciativas de orden regional. La idea es que entre las dos casas (la primera en el norte de la capital y la segunda en el centro), los tres departamentos tengan una sede de la RAP, para que se hagan reuniones, activaciones de marca, vitrinas comerciales, se brinde asesoría y se genere acompañamiento a la gestión de los entes territoriales.
La propuesta surgió en la visita que los mandatarios de Caldas, Luis Carlos Velásquez; y Risaralda, Víctor Manuel Tamayo; hicieron al gobernador del Quindío, Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas. A cargo de la presentación estuvo la directora de la casa delegada del departamento anfitrión, Isabel Patricia Orozco Orozco. “En el último gobierno se visitaron más de 750 agencias de viaje y pretendemos duplicar la cifra para esta administración. En este mismo sentido, hemos hecho visitas y ofrecemos información del destino a los actores del turismo. Pero también manejamos proyectos de cooperación internacional, como es el caso de las visitas de operadores de turismo comunitario en café de Vietnam a la región, y de las que los operadores propios hacen al país asiático”, ilustró, poniendo como ejemplo la senda que la unión de los departamentos podría seguir.
De momento se discuten los detalles técnicos para la operación conjunta de estas dos “embajadas”. Sin embargo, se plantea que la del Quindío sirva como sede social y enfocada en la promoción, mientras que la de Risaralda, cercana al Centro Administrativo Nacional, pueda apoyar las gestiones ante el gobierno central