Alternativas enfocadas en agricultura y turismo, se abren para un cultivo emergente en el departamento que ha demostrado márgenes importantes de rentabilidad para sus agricultores: el cacao. Siguiendo el modelo exitoso del café, que hoy en día tiene una oferta de turismo experiencial asociada a su producción, la industria cacaotera se encamina a crear una ruta que llegaría a enriquecer el portafolio de alternativas del destino Quindío.
Para emprender los primeros pasos, las secretarías departamentales de Turismo, Industria y Comercio; y Agricultura, Desarrollo Rural y Medio Ambiente, realizaron una visita a una finca dedicada a este producto, que podría convertirse en sede de un pilotaje de esta actividad.
Al respecto, el director de Emprendimiento Rural de la cartera de Agricultura, Juan Camilo Tabares Alzate, reconoció las bondades de este cultivo desde el punto de vista del sector primario: “El cacao es una de las líneas priorizadas en el departamento por la UPRA debido a su integralidad: la parte plana del departamento es apta para su producción, y además un sembrado que puede convivir con otros (como la yuca, el plátano o el banano), lo que garantiza un buen flujo de caja para quien incursione con este esquema”, indicó.