Desde la secretaría de Salud departamental, se anunció que una vez más en el Quindío se ha decretado la Alerta Roja Hospitalaria como consecuencia del aumento de casos por COVID-19, el consiguiente aumento en ocupación de camas UCI y de Cuidados Intermedios, así como de camas hospitalarias y el incremento de fallecidos por el virus.
Por lo anterior, se realiza llamado a las Empresas de Planes de Beneficios para que pongan en alerta sus redes prestadoras de servicios de salud y subsanen la emergencia en la red hospitalaria, indicando que en el momento de la actual declaratoria de Alerta Roja, se cuenta con un porcentaje ocupacional del 85% en camas UCI entre el sector público y privado. De la misma manera, se requiere a las instituciones prestadoras de servicios en salud, reforzar actividades de atención primaria, promoción y prevención, educación, además de mejorar los servicios del primer nivel, para evitar congestiones en la red de mediana y alta complejidad; en esta última se deben adoptar acciones para liberar camas UCI que serán destinadas a pacientes con coronavirus.
La alerta roja hospitalaria implica igualmente la restricción de procedimientos quirúrgicos en todas las especialidades y los procedimientos no urgentes y diferibles. De la misma manera, se restringe el acceso a servicios hospitalarios para pacientes de otros departamentos cualquiera sea su diagnóstico y respetando el criterio médico y los protocolos del caso. Se aclaró que mientras esté vigente la alerta, la coordinación para el acceso a las unidades de Cuidados Intensivos e Intermedios será regulada por el CRUE.
Finalmente, la circular que contiene la declaratoria, exhorta a los mandatarios locales para que extremen la implementación y promoción de todas las medidas de autocuidado promocionadas por las autoridades de la salud, lo mismo que los hábitos de vida saludable entre la población.