Con una siembra de especímenes de palma de cera en el predio La Esperanza, en Cocora, Salento, el gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas celebró los 35 años de la Ley 61 de 1985, que impulsada por su padre Guillermo Jaramillo Palacio, decretó esta especie como árbol nacional de Colombia. Para tal fin, sembró una de las plantas en compañía de la Octava Brigada, el batallón de Alta Montaña, Policía de Carabineros, Parques Nacionales Naturales, y la alcaldía de Salento, que además celebró con esta actividad los 138 años de vida jurídica del municipio.
“Celebramos la expedición de esta Ley, que convirtió en baluarte nacional esta especie endémica de la región, en un proyecto generado por mi padre en su época de representante a la Cámara, pero también por mi madre desde su vocación por la jardinería. En este momento estamos unidos todos estos actores, pero también los ambientalistas y los dueños de los predios, para adelantar esta gestión con la que podremos generar mejores condiciones de conservación y replicar, por ejemplo, la experiencia lograda con el loro orejiamarillo, una variedad que salió de la lista de especies en peligro de extinción”, indicó el mandatario.
La actividad hace parte de la operación Artemisa, adelantada por el Ejército con el fin trabajar por la riqueza medioambiental de la zona cordillerana a través de acciones como esta o el combate contra los delitos ambientales, declaró el comandante del batallón de Alta Montaña, teniente coronel Edwin Ortiz Tascón. Por su parte, el CEO de Biomma –red de reforestación social que une más de 30 empresas-, Juan Echeverry, destacó que de la mano con el Ejército se han sembrado ya 8.000 árboles nativos, palmas de cera y frailejones, de los 14.0000 que se tienen como meta.