Mientras en el país se discute la creación de los pliegos tipo, documentos con exigentes estándares que evitan el amaño en los procesos contractuales, en el Quindío la contratación pública que realiza la administración liderada por el Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá ya cuenta con esta herramienta.
Cielo López Gutiérrez, secretaria Jurídica y de Contratación del Quindío, explicó que desde el año pasado, cuando inició la actual administración departamental, su cartera planteó la necesidad de elaborar un manual de contratación que se adecuara a la nueva normatividad, de acuerdo con el Decreto 1082 del 2015, que compiló una serie decretos reglamentarios de la Ley 80 de 1993, y así establecer unas condiciones que garantizaran la pluralidad de oferentes y la calidad de las obras para el departamento del Quindío, y así se hizo.
Es tan importante esta herramienta jurídica, que actualmente se estudia en la Cámara de Representantes para convertirla en ley de la República. Fernando Carrillo Flórez, Procurador General de la Nación, instó a este organismo lograr su aprobación: “Estamos seguros que va a haber, de parte de los representantes a la cámara, un ejercicio de responsabilidad histórica que demuestre que son verdaderamente cruzados en la lucha contra la corrupción. Aquí está bastante claro que este es un mecanismo para eludir la ley y para convertir los recursos públicos en una feria de aventuras empresariales que no tiene sentido”.
El gobierno quindiano ejemplifica la seriedad y el cuidado de los recursos, ya que los esquemas de contratación que se tienen establecidos desde el 2016, evitan contratos hechos a la medida. “Se realiza un trabajo conjunto con la Secretaría de Aguas e Infraestructura para estandarizar los requisitos, dependiendo de la naturaleza de las obras, para evitar la realización de contratos hechos a la medida”, afirmó Cielo López Gutiérrez.