El gobernador de los quindianos, Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá, se fijó como meta para 2018 convertirlo en el año más seguro de la historia del departamento, y para ello seguirá trabajando de manera articulada con todas las autoridades, como lo hace desde el primer día de su gobierno, pues gracias a esta sinergia que nunca había tenido el Quindío, se dieron grandes resultados en 2017, como las cifras más bajas en criminalidad de los últimos 15 años.
En el último Consejo de Seguridad del año, el mandatario de los quindianos analizó junto con la Policía, Fiscalía, CTI, Ejército, Defensoría, Procuraduría, y demás autoridades, las acciones ejecutadas en el marco de su estrategia de Seguridad Humana, con la que ha logrado la disminución del 21% en homicidios en comparación con la vigencia 2016, desarticular más de 50 bandas delincuenciales, reducir el hurto principalmente en residencias, y darles a los ciudadanos un departamento cada vez más seguro.
En este espacio también se revisaron las estrategias de intervención interinstitucional con enfoque diferencial para poblaciones vulnerables, la lucha contra el microtráfico, la iluminación de parques y calles, la recuperación de entornos seguros y la seguridad rural. Para el próximo año se hará especial énfasis en el estudio de los delitos de máximo impacto, los lugares afectados, las organizaciones que los cometen y las nuevas acciones investigativas que se deben implementar.
El secretario del Interior, Héctor Alberto Marín Ríos, anunció que al Quindío llegará la seccional Antinarcóticos de la Policía, para instalarse en las terminales de transporte y el aeropuerto internacional El Edén, y que en adelante se harán operativos con los binomios (uniformado – canino) del Ejército y la Policía para blindar el territorio.
“Antes de finalizar el año nos tomaremos el departamento con todas las fuerzas Militares y de Policía, para que los quindianos vean a sus autoridades unidas y sepan que esto es el resultado de un trabajo conjunto en el que se atienden las necesidades de todos, además para que los delincuentes sepan que no hay espacios para ellos”, puntualizó Marín Ríos.
Finalmente, insistió en que las autoridades hacen su trabajo para garantizar la seguridad, pero que los ciudadanos tienen la obligación de aportar con acciones simples como dejar sus casas con las puertas y ventanas cerradas cuando salgan de ellas, no recibir ayuda en los cajeros electrónicos ni descuidar sus tarjetas durante las transacciones, hacer caso omiso a cualquier llamada sospechosa o mensajes con supuestos premios, pues provienen de extorsionistas que están en las cárceles, cuidar su prima navideña y no usar sus celulares mientras están en las calles.