Quindianos y quindianas, hace 50 años un puñado de gente cívica, gente del común y corriente, recogió las banderas que otras generaciones ya habían ondeado buscando independizarse del departamento de Caldas y constituirse en una nueva región. En 1966, ese grupo de ciudadanos logró esa emancipación y en todos los municipios hubo fiestas cívicas, la gente se volcó a las calles a expresar su alegría por la importancia de ese acontecimiento.
50 años después tenemos que repasar nuestra historia y decir con asombro que hemos crecido, y mucho; además nos sobrepusimos a una tragedia natural como la que pocos departamentos han vivido en el país. Desde nuestra fundación y desde la refundación del Quindío después del terremoto de 1999, hemos venido creciendo cívica y socialmente.
Por eso hoy tenemos que sentirnos muy alegres, y que esa alegría se convierta en reflexión para que pensemos en el Quindío por el que queremos trabajar y construir con nuestras propias manos en los próximos 50 años. Vivimos para la historia, podemos hacer desde hoy un departamento nuevo que no pierda el civismo que le dio su origen y que se constituya en un ejemplo para el país, un ejemplo de convivencia, de respeto, de cuidado a la ecología y su riqueza natural, un departamento líder en el adecuado tratamiento de aguas residuales y disposición final de las basuras, un departamento al que los colombianos y extranjeros visitan precisamente porque nos reconocen como un pedazo de cielo en el centro de Colombia.
Que estos 50 años que hoy celebramos sean pasado, presente y proyección al futuro de lo que hemos sido, somos y seremos en el concierto nacional.Felicitaciones quindianos, aquí estamos celebrando y proyectándonos al futuro.
Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá
Gobernador del Quindío