A la espera de las disposiciones del ministerio de Educación frente a la afectación en el Quindío de una posible erupción del volcán Nevado del Ruiz, se encuentra el departamento para acudir a alternativas que permitan mantener las clases durante la contingencia. No obstante, mientras se mantenga el nivel de alerta naranja, la presencialidad se mantendrá con normalidad, anunció la jefe de la cartera departamental, Ana María Giraldo Martínez.
“De darse algún evento catastrófico, posiblemente habría 4 municipios impactados: Salento, Filandia, Circasia y Quimbaya, en donde tenemos 112 sedes educativas. El ministerio ha estado muy pendiente de cómo evolucione la situación, y mantenemos contacto permanente con la Udegerd, para saber cómo actuar, en caso de que se vean contaminadas nuestras fuentes hídricas, lo que nos llevaría a tomar otras decisiones”, explicó.
Entre estas opciones se habla de implementar de manera temporal la virtualidad, como en la época del confinamiento preventivo en medio de la pandemia, para lo que ya se tendría un trabajo adelantado con la disposición de contenidos en el Campus Virtual de la secretaría. Otra alternativa radicaría en la utilización de las guías de aprendizaje empleadas en el modelo Escuela Nueva. “Desde este lunes 10 de abril entramos a hacer un monitoreo en tiempo real –que no se había podido adelantar durante Semana Santa por no tener estudiantes en las aulas-, y así prepararnos mejor ante cualquier eventualidad”, señaló.