Desde el instituto Liceo Quindío, sede Carlos Lleras del municipio de Salento, se dio apertura al programa “Un viaje a ritmo de corazón”, una iniciativa que surge gracias a la unión de esfuerzos de la oficina de la gestora social Victoria Arias Cifuentes y la Fundación Pequeño Corazón de Manizales. Este programa tiene como objetivo detectar y tratar enfermedades congénitas del corazón en los más pequeños del Quindío, brindando así una oportunidad vital para mejorar la calidad de vida de los niños afectados por estas condiciones. La labor es crucial, pues busca prevenir complicaciones mayores a través de un diagnóstico temprano.
Las jornadas médicas del programa se adelantarán mensualmente en cada uno de los municipios del departamento, con un enfoque especial en la población rural. Este esfuerzo coordinado no solo permitirá identificar a tiempo las afecciones cardíacas, sino que también ofrecerá tratamientos adecuados y seguimiento continuo a los menores diagnosticados. Jessica Moreno, gestora del programa comunitario en salud de la fundación, explicó que el equipo de trabajo en la ciudad de Manizales está conformado por aproximadamente 16 personas, aunque en cada jornada de tamizaje cardiovascular viajan entre 6 y 8 personas, incluyendo médicos y voluntarios esenciales para la coordinación logística. En esta primera jornada, alrededor de 150 niños fueron los beneficiados, recibiendo atención especializada y el seguimiento necesario para sus condiciones.
La Fundación Pequeño Corazón, que nació hace 28 años en la ciudad de Manizales gracias a la doctora Mónica Giraldo Mejía, ha sido fundamental en la implementación de este programa, luchando por los niños con enfermedades cardíacas desde su creación, y “Un viaje a ritmo de corazón” se lanzó en 2018, habiendo realizado ya 205 jornadas en distintos niveles municipales y departamentales. Gracias al apoyo del Gobierno del Quindío, este programa ha podido expandirse y llegar a Salento como el primer municipio en inaugurar sus jornadas en este departamento, con la meta de salvar más vidas y atender a los niños de los lugares más vulnerables.
Voz de Alexandra Zuluga, gestora social de Salento.
Voz de Jessica Moreno, gestora del programa comunitario en salud de la fundación Pequeño Corazón.