El gobernador del Quindío, Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá, y la gestora social, Liliana Janet Osorio Buriticá, compartieron con un grupo de mujeres rurales cafeteras los avances del proyecto Paisaje, Mujer y Café, iniciativa que cuenta con el apoyo de la Secretaría de Familia, la empresa Smurfit Kappa, antiguo Cartón de Colombia S.A., y del Comité Departamental de Cafeteros.
El proyecto, que en su primera fase contempla la creación de una tienda en el parque principal de Pijao como punto de venta del grano que ellas mismas producen en sus fincas, dará vida a una unidad productiva que les permitirá generar ingresos. El inicio de las obras ya tiene el visto bueno y la firma del gobernador, pero por solicitud del mandatario del municipio, Edison Aldana, la construcción prevista para este mes de diciembre se postergará para la primera semana de enero de 2017, con el fin de no incomodar a la población pijaense y a los turistas con obras durante la época decembrina.
“Muchas mujeres van a querer imitar la valentía y pujanza que han demostrado las integrantes de la asociación Paisaje, Mujer y Café de Pijao, y serán un ejemplo para todas las mujeres quindianas, por eso estoy reunido con 15 mujeres cafeteras compartiendo un desayuno navideño y ratificando el compromiso que tiene mi administración con las mujeres y con el campo quindiano”, dijo el Padre Carlos Eduardo Osorio Buriticá.
La gestora social del Quindío, Liliana Janet Osorio Buriticá, expresó: “Mientras nos entregan el café ya construido, las 15 mujeres se están capacitando para poder empezar a trabajar en enero en lo que se ha convertido en parte de su proyecto de vida. Todas están muy entusiasmadas y nosotros también al verlas así. Como gobierno estamos acompañándolas en cada paso desde que se planteó la iniciativa y estaremos ahí hasta que estén en su café y podamos replicar el modelo en los otros municipios”.
Nelsy Mejía Rodríguez, integrante de la asociación Paisaje, Mujer y Café, dijo: “Le agradezco mucho al señor gobernador por todo lo que está haciendo por nosotras, pero sobre todo por mandarnos ese ángel de la guarda que ha sido la gestora social, quien nos cogió de la mano desde el principio y adoptó este proyecto como suyo, como si fuera un hijo, y por eso es un hecho hoy en día gracias al esfuerzo de todas, ha sido una lucha que ha valido la pena”.