Resultados contundentes en la lucha contra el contrabando y los productos adulterados con los que se defraudan las rentas departamentales, a su vez que ponen en peligro la salud de sus consumidores, fueron presentados en el segundo comité Anticontrabando del año. Las cifras presentadas por el Grupo Operativo Anticontrabando, resultan de relevancia si se tienen en cuenta hechos como los presentados el pasado sábado 21 de diciembre, en el que se aprehendió un cargamento de una popular marca de aguardiente del que, además de comprobar que no podía tener presencia en el departamento de partida, ni en el de llegada, se sospecha que está adulterado.
“Este producto provenía de Cundinamarca con destino al Valle del Cauca. En el marco del trabajo articulado entre las gobernaciones, hablaba con el secretario de Hacienda de Cundinamarca, y me contaba que este departamento no tiene autorización de introducción de esta marca, así como el Valle tampoco. Las primeras sospechas es que puede estar adulterado”, señaló el secretario de Hacienda del Quindío, Carlos Alberto Sierra Neira.
La detención de esta mercancía en el departamento se suma a un balance altamente positivo en cuanto a las labores de inspección y control realizadas por este equipo, adscrito a Hacienda departamental y que cuenta con el respaldo de la Federación Nacional de Departamentos. A lo largo de la vigencia 2024, se visitaron 6.926 establecimientos y 844 comercializadoras, se revisaron 5.173 vehículos, y se impactó con labores de capacitación y sensibilización a 1.200 jóvenes de todo el departamento. Así mismo, se procedió a la destrucción de 61.005 elementos (entre vínicos, aperitivos, bebidas alcohólicas y cigarrillos).
Pero la labor de erradicar el contrabando y la adulteración es una responsabilidad compartida en la que la ciudadanía debe estar vinculada, por lo que Sierra Neira hizo el llamado a la comunidad para que esté pendiente de señales y actúe en respuesta: “Revisar que estén señalizados con la estampilla del Quindío y escanear el código QR impreso en ella, lo que arrojará datos como las características del producto, el establecimiento que lo está distribuyendo, cuándo se hizo la tornaguía, cuándo pagó el impuesto. Pero también tenemos que estar alerta: no compremos tragos baratos, así la diferencia sea de 10.000 pesos o más: es una de las primeras señales; lo barato nos puede costar la vida”.