Para el gobernador Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas, el cierre del proyecto ‘Desarrollo Experimental para la Competitividad del Sector Cafetero del Departamento del Quindío' no es un final, sino un comienzo, el inicio de una nueva edad de la caficultura en el departamento. Y como muestra de ello, aprovechó su intervención en el acto protocolario de cierre de esta iniciativa con el anuncio de otro proyecto, que quedará con su disponibilidad presupuestal lista para que su sucesor lo ejecute.
“Logramos ‘raspar la olla’ y vamos a aportar $5.000 millones más de regalías del Quindío, para beneficiar a 400 familias cafeteras”, adelantó el mandatario. El proyecto en mención se denomina ‘Fortalecimiento del Paisaje Cultural Cafetero Mediante la Implementación de un Modelo de Economía Campesina Sustentado en la Producción Sostenible de Café y el Reconocimiento De La Tradición Cafetera Del Departamento Del Quindío”. A través de él, se pretende lograr la renovación de cafetales envejecidos o ya desaparecidos, pero en un modelo que rescata el cafetal tradicional, en el que había árboles intercalados para generar sombrío. También tendrá un componente orientado al tratamiento de las aguas mieles residuales en la producción, y que necesitan una disposición final correcta para no contaminar las fuentes hídricas.
Este nuevo aporte al sector se suma a la inversión histórica realizada por la administración ‘Tú y Yo’ en temas de agro: “Hemos invertido aproximadamente $77.000 millones en temas rurales, cuando el recurso ordinario de la Gobernación no supera los $18.000 anuales; esto supera los cuatro años de recursos ordinarios, que se convierten en la inversión más grande en la historia del departamento en el sector agrícola. De esos $77.000 millones, se han destinado al sector cafetero $28.600 millones -$18.239 millones solo con el Comité de Cafeteros-, beneficiando a 3.500 familias dedicadas a esta actividad”, señaló en su discurso el gobernador.