Gracias a las medidas de prevención tomadas por la Gobernación del Quindío frente al Programa de Alimentación Escolar, que permite contar con los suministros con 10 días de anticipación, la situación para las 224 sedes educativas del departamento se encuentra en normalidad a la fecha en medio de la contingencia por el gas domiciliario que se presenta en el Quindío y regiones vecinas. Dichos colegios trabajan en sus cocinas escolares con gas de pipeta.
Así lo confirmó la secretaria de Educación, Ana María Giraldo Martínez, quien reveló que las únicas novedades presentadas se dieron en el municipio de Circasia, específicamente en la Institución Educativa Henry Marín, en donde se presenta escasez del producto debido a que los pobladores de la localidad se volcaron de forma masiva a abastecerse y llevando a que la demanda se desbordara. La situación ha generado inquietud entre los rectores responsables de las 8 sedes con asiento en esta municipalidad.
Según lo indicó la secretaria de Educación, el operador ya adquirió los insumos para esta y la próxima semana y se le solicitó de parte de la administración departamental contactarse con sus proveedores para garantizar el aprovisionamiento, incluso con el transporte de pipetas de otros departamentos.