Se abre una nueva etapa para la atención a la discapacidad en el Quindío, una de las banderas del gobierno de Roberto Jairo Jaramillo Cárdenas, con la construcción del Centro Departamental para la Atención Integral de Personas en Desprotección Social en las antiguas instalaciones de Abrazar. La obra iniciará con el desarrollo de la primera fase, que comprende la edificación de los bloques 2, 3 y 4, de 10 en total de la iniciativa.
El proyecto ofrecerá salas de atención y espera; ambientes para la hidroterapia, termoterapia y equinoterapia; teatro, camerinos y sala de proyección audiovisual; piscina, restaurante y habitaciones con sus baterías sanitarias; así como escenarios deportivos, como una cancha sintética, entre otros elementos que buscan garantizar una atención adecuada, oportuna y eficaz a una población estimada de 4.300 personas con discapacidad (correspondiente con el 8.4% de la población total del Quindío).
Adicionalmente, se espera contar con la presencia institucional de la Defensoría, el DPS o el ICBF, entidades que proveerán la rehabilitación, la garantía de los derechos y el acompañamiento jurídico y social de poblaciones vulneradas, como niños, niñas, jóvenes, mujeres cabeza de hogar y adultos mayores. Esta es una iniciativa en la que el Estado asume su responsabilidad con estas comunidades, anteriormente atendidas por particulares.