Daniel Toro, es un joven paraciclista antioqueño de 29 años, que con su optimismo y talento deportivo se robo la admiración de quienes asistieron al Gran Fondo Nairo Quintana. Él a pesar de haber perdido sus dos piernas en un atentado cuando prestaba servicio militar, es uno de los paraatletas que corrieron al lado de Nairo, durante este fin de semana.
Para Daniel, quien ya ha corrido tres competencias nacionales y una internacional, el deseo de seguir volando por medio de una bicicleta le ayudo a levantarse más rápido de lo que pronosticaban los médicos y de una bicicleta convencional pasó a una de mano en menos de un año: “Yo no lo veo como un problema o una discapacidad, es una oportunidad que me dio la vida”, señaló.
El Fondo Nairo Quintana apoyado por el Gobierno del Quindío, permitió la visibilización de héroes anónimos como Daniel, quien ha desde ya se prepara para una nueva competencia o una oportunidad como el mismo la cataloga.