Con un 92% de avance en la obra que conecta al municipio de Pijao con Rio Verde, se puede decir que este importante tramo, que consta de 13 kilómetros de intervención, ya es un hecho. Restan detalles como demarcación y terminación de cunetas, pero los beneficios del mejoramiento de esta vía ya se sienten en los habitantes del municipio cordillerano, quienes hablan de desarrollo, bienestar, turismo y tranquilidad.
“Anteriormente a la gente le daba pereza venir a Pijao por los huecos en la vía. Ahora los tiempos de llegada han mejorado, ha aumentado el turismo y se dañan menos los carros. Las vías son el desarrollo para los pueblos. Incluso transitar de noche era complicado, ahora pasamos con más tranquilidad y con menos peligro de accidentarnos”, explicó Walter Ruiz, conductor de transporte público de la localidad.
Una de las razones de peso para la urgente entrega de este importante tramo para el Gobierno del Quindío, era salvaguardar las vidas de los habitantes de Pijao, quienes a causa del mal estado tardaban en desplazarse en caso de emergencias hacia el hospital de Armenia. “Cuando teníamos que trasladar pacientes era muy complicado: había pacientes muy delicados como las mujeres en embarazo o las personas con infarto y no podíamos movernos mucho, entonces tocaba bajar muy despacio y parar por los huecos. Afortunadamente en este momento quedó excelente, ahora el paciente no sufre tanto y nos demoramos menos en llegar”, indica César Reyes, conductor de la ambulancia del hospital Santa Ana.
Ciclistas, turistas locales, nacionales e internacionales ahora ven al municipio cordillerano como un destino agradable para conocer y visitar. Pueden disfrutar de una vía con fácil acceso, lindos paisajes y un destino con café de excelente calidad y buena gente. “Antes a la gente le daba pereza venir al pueblo porque había mucho hueco, ahora la gente se anima a venir. Pijao es un pueblo muy bonito, aquí todos son bienvenidos a tomar un rico café, comer sancocho y disfrutar de nuestros sitios turísticos, es muy tranquilo”, ratifica María Inés Ramírez, una de sus habitantes.
Audio César Reyes, conductor de la ambulancia