En medio de los retos que enfrenta el país en materia de orden público el país, el gobernador del Quindío, Juan Miguel Galvis Bedoya, envió un mensaje de reflexión y compromiso para y con las autoridades civiles y de la Fuerza Pública: aunque el departamento se reconoce como un territorio de paz y tranquilidad, la seguridad no puede darse por sentada.
El mandatario expresó su preocupación frente a la situación que atraviesan otras regiones del país y fue enfático en señalar que el Quindío debe estar preparado para enfrentar cualquier amenaza. Y afirmó: “Lo único que les pido es que no esperemos a que ocurra un problema para reaccionar. Tenemos que anticiparnos, trabajar juntos y mantener la disciplina de convocar consejos de seguridad permanentes”.
El gobernador hizo un llamado directo a la Policía, el Ejército y a todos los actores institucionales a fortalecer los mecanismos de prevención y coordinación. Subrayó que la seguridad no es un tema coyuntural, sino una prioridad que debe ocupar la agenda diaria del gobierno departamental y de las administraciones municipales.
Con un tono sensible y crítico, Galvis recordó que el Quindío no puede caer en la complacencia. “Nuestro territorio ha sido un ejemplo de convivencia, pero no podemos confiarnos. Debemos cuidar lo que tenemos, proteger a nuestra gente y estar listos para cualquier desafío”, concluyó. Con este mensaje, el Gobierno del Quindío ratifica que la seguridad y la paz se construyen con presencia constante, articulación interinstitucional y cercanía con la comunidad y por ello se ha venido trabajando constantemente.