El viceministro de Trabajo Carlos Alberto Baena López lanzó en el Quindío, junto con autoridades departamentales, la segunda parte de la estrategia de prevención y atención de violencia en niñas, niños y adolescentes que hace parte de la campaña de la política pública de trabajo infantil y adolescente.
La primera parte de esta iniciativa se desarrolló en el mes de mayo durante reunión del Comité Departamental Intersectorial para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y la Protección al Adolescente Trabajador, CIETI.
Y ayer 29 de octubre en el sector de Versalles en Calarcá en la vía que conecta al Quindío con Risaralda y el Valle del Cauca, se hizo el lanzamiento de esta iniciativa que busca erradicar la explotación sexual de menores en este importante corredor vial del departamento.
Las autoridades departamentales insistieron en la necesidad de ser enfáticos en la importancia de insistir en estrategias de prevención de la violencia en niños, niñas, jóvenes y adolescentes, específicamente en el corredor de Versalles.
La secretaria de Familia del Quindío María del Carmen Aguirre Botero expresó que se busca realizar un proceso interinstitucional en la protección de los niños, niñas, jóvenes y adolescentes y que se han desarrollado proyectos desde la gobernación del Quindío y Bienestar Familiar como lo es el Comité Consultivo Intersectorial de Abordaje Integral de la violencia de género y las violencias sexuales; además de la estrategia para la eliminación de la violencia comercial.
Dentro de esa labor en conjunta el viceministro de Trabajo Carlos Alberto Baena López comentó sobre los esfuerzos del comité nacional para apoyar a los entes regionales buscando luchar en contra de la explotación sexual comercial, reconociéndolo como “un delito que no se puede naturalizar”.
La directora regional del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Adriana Echeverri González manifestó que sólo han sido denunciados a través de la institución 12 casos de explotación sexual durante estos cuatro años, por lo cual invita a la comunidad en general para que denuncie a través de la línea #141.