La gobernación del Quindío ratificó su compromiso de garantizar la educación en cualquier lugar del departamento donde exista población infantil, y que en cualquier sector rural o vereda, en el que habite mínimo un niño que lo requiera, se mantendrán las sedes educativas abiertas.
El secretario de Educación del Quindío Francisco Javier López Sepúlveda indicó que aunque la disminución de población infantil en las zonas rurales del departamento es preocupante, debido al desplazamiento de las familias a las zonas urbanas y en muchos casos a que los dueños de fincas solo contratan caseros y trabajadores sin hijos, “las sedes escolares rurales se mantendrán abiertas mientras exista la necesidad aunque sea para un solo estudiante, como ha sido la política del gobernador Carlos Eduardo Osorio Buriticá”.
Ana Luisa Ruiz Tejada, directora de Cobertura Educativa de la secretaría Educación del Quindío, informó que con el acompañamiento del área de Inspección y Vigilancia se viene haciendo un seguimiento a las diferentes escuelas de todas la zonas rurales que han reportado disminución en las matriculas o no reportan, indagando las razones y, en los casos que se requiere, adelantando un trabajo con las alcaldías y los rectores para identificar qué menores se encuentran desescolarizados en la zona o si hay familias dispuestas a desplazarse a estos sectores e ingresar a los niños allí.
“Se van a tomar medidas de cierre temporal de las sedes que no reporten ninguna matrícula, toda vez que hay que salvaguardar los inventarios que hay en ellas”, explicó la funcionaria. Durante esta vigencia se ha hecho seguimiento a cuatro instituciones que no han reportado movimiento de matrículas, pero se hace la claridad que la política de la administración departamental es que estás se reabrirían si se presenta la necesidad aunque sea para un solo estudiante.